Esparcen mis dignidades
estos veranos festivos
que por variados motivos
no me gustan las ciudades.
Estoy sin necesidades
feliz en este jardín
cantando como el crespín
en sombra de cocotero
para ponerme sombrero
cuando venga el bailarín.-
Del susto casi me pasman,
en un somero vistazo
(aunque luego, me entusiasman),
las rimas que son baldazo
de maña y dificultad.
Tiene patria potestad
sobre ellas el diccionario.
Evita lo estrafalario,
lo chato y la vanidad.
Según pinte la ocasión...
He dejado rima aguda
la tomo porque sin duda
será brillante misión.
Daré la contestación
marcando bien los bemoles
cerca de los girasoles
ya que embellecen la vista
y perdone que le insista
entre tantos resplandores!
Muchachadas carismáticas
serán por sus esplendores
que a mí me causan ardores
porque se muestran simpáticas.
No sé si son matemáticas
las vueltitas en el aire
algunas tienen donaire
pero la piruetas duelen
aunque los rostros se hielen,
entre vividos desaires.
Cometiendo disparates
cada día me persigue
como una mosca me sigue
aunque muy mal tú me trates.
A mi dame chocolate
que hay para todos los gustos
jamás perdono disgustos
pero mi olvido te extraña
y me causa una maraña
que me darán varios sustos.
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