Hay un último rayo que procuro
retenerlo marcado tan deshecho,
al evadir la idea del estrecho
laberinto del tiempo, por oscuro.
Nadie tiene la clave, lo aseguro.
Saltamos de la cuna , lecho a lecho
llevando estrellas rojas en el pecho.
Ya logramos la senda sin apuro.
Toda música vana será abrigo
en guardado minuto de la historia
y para ello no habrá ningún testigo...
Bien sabemos los dos, cuál es la gloria...
Hemos amado mucho y entendido
que fue mucho mejor tener memoria.
Amalia Lateano
19/05/2022
No hay comentarios:
Publicar un comentario